Hace un mes, el Colegio Nacional de Quilmes, recibió un llamado alertando que había un artefacto explosivo en la escuela, por lo que se procedió a evacuar el establecimiento. Los peritos identificaron el domicilio desde donde se había realizado la llamada, por lo que realizaron un allanamiento a la vivienda de Mario Alfredo Jiménez. Allí secuestraron un revólver calibre 32 largo y 6 celulares. Al parecer, el arma no estaba reglamentada.
Jiménez fue acusado de “intimidación pública”, aunque fue liberado luego de una hora. Su madre aseguró que su hijo “es intachable” e indicó que las acusaciones “son mentiras”.
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