El cuerpo de Concepción Arregui fue encontrado por Buzos del cuerpo de Bomberos de Mendoza en las profundidades del dique Potrerillos.
La mujer chilena de 59 años había sido asesinada por su marido Roberto Audano quien confesó que le disparó y arrojó el cuerpo en un embalse ubicado en la zona cordillerana.
Concepeción había sido vista por última vez el 5 de febrero y su familia, desde Chile, comenzó una campaña para encontrarla. Desde un primer momento desconfiaron de Audano, quien sin embargo al principio colaboró con la búsqueda. Hasta que se quebró y el 7 de marzo confesó el crimen. Fue detenido e imputado por “homicidio agravado por el vínculo“.
El trabajo para encontrar el cuerpo de Arregui se complicó debido a las malas condiciones climáticas y porque en los espejos de agua mendocinos no es buena la visibilidad. Desde el viernes se había reforzado el operativo, del que participaron buzos de la Policía, de Bomberos y de la Escuela de Buceo Aconcagua.
El cadáver habría sido encontrado a unos 20 metros de profundidad en las condiciones que había confesado Audano: envuelto en una bolsa de dormir, atado con cuerdas y cubierto con una carpa color azul.
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