Santo en la Web y en la Red

29 de marzo, 2024

Señora de Lanata. Para Fernando Burlando, “Cuando empecé a salir con Jorge Lanata me dejó de pagar”.

Barby Franco. La pareja de Burlando dijo, “Voy a ser sincera, no nos invitó a ninguno de los dos”.

Un gran ausente en la boda de la abogada Elba Macrovecchio, y el periodista Jorge Lanata fue Fernando Burlando y su pareja Barby Franco.

La ceremonia se llevó a cabo en una estancia de lujo en Exaltación de la Cruz, provincia de Buenos Aires, junto a 150 invitados entre familiares, amigos y celebridades del mundo del espectáculo y la política.

En el programa LAM (América) donde habían revelado la identidad de los tortolitos días atrás: “Llama mucho la atención porque es un vínculo de trabajo de muchísimos años”, comenzó diciendo Pía Shaw antes de revelar la identidad de la pareja ausente en la boda: Fernando Burlando y Barby Franco.

“Llama mucho la atención porque es un vínculo de trabajo de muchísimos años”, comenzó diciendo Pía Shaw antes de revelar la identidad de la pareja ausente en la boda: Fernando Burlando y Barby Franco.

LAM, por América.

Desde el programa Intrusos fueron a buscar la palabra de Barby: Tenemos un cumpleaños de 15, que es más importante, y pasan reaguetón y trap”, agregó.

“Voy a ser sincera, no nos invitó a ninguno de los dos y sé que tampoco a ninguno del estudio. Sé que trabajó muchos años en el estudio de Burlando, pero no invitó a nadie. ¿Se agrandó, Chacarita?”, sentenció.

Luego de que trascienda la mala relación entre Marcovecchio y Burlando, fue la flamante esposa de Lanata quien salió a aclarar la situación en sus redes sociales.

“En el contexto de mi boda tener que aclarar que me fui del estudio por defender mis principios y mi valor como mujer profesional, ¡es horrible!”, escribió. Y sentenció: “¿Rogar que te paguen? Eso no es digno”.

Finalmente se refirió al final de su relación laboral con Burlando. “Terminó mal, cuando empecé a salir con Jorge Lanata, me dejó de pagar. Yo trabajo, no voy a estar ejecutando a un cliente o haciendo cosas que no corresponden, no va con mis principios ni mi ética. No me paga, se lo pido una vez, dos veces, durante prácticamente un año y el primer martes de junio yo le dije a Fernando que así no aguantaba más y que me iba. Él me dijo que aguantara, que iban a entrar casos que rindieran, pero es un gran estudio, no soy tonta. Yo no trabajo para comprarme vestidos, sino para mantener dos criaturas”, disparó contundente. 

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