“Mis ganancias económicas a lo largo de todos estos años no pueden considerarse como un hecho delictual”
Sofía Clérici, la modelo implicada en la causa “Yategate” junto a Martín Insaurralde, declaró ante la justicia con un escrito.
La modelo, que estuvo involucrada en el escandaloso viaje con el ex jefe de gabinete de Kicillof y ex intendente de Lomas de Zamora, en un viaje en yate por el mar Mediterráneo lleno de lujos en plena campaña electoral, es investigada por enriquecimiento ilícito.
Clérici declaró que su participación en el viaje a Marbella con Martín Insaurralde no constituye un delito y que sus ingresos provienen de altos honorarios y costosos regalos por sus servicios profesionales.
“Por mi exposición y reconocimiento público de al menos 15 años, es altamente requerida mi compañía y acompañamiento profesional para diversos acontecimientos, entre ellos, para realizar viajes al exterior por períodos prolongados”.
En el texto, aseguró que ser acompañante no constituye un delito ni está relacionado con la prostitución, a pesar de recibir altas sumas y regalos costosos como parte de su labor.
“Percibo honorarios que en la mayoría de las veces se trata de importantes sumas de dinero, y en otras, regalos costosos, ya sean joyas, ropa o accesorios”.
De esa forma, Clérici, que está inscripta como monotributista en una de las categorías más bajas, intentaba justificar los US$600.000 que la Justicia le secuestró en uno de los allanamientos que le realizaron en su casa.
“El resultado del allanamiento en mi domicilio no revela per sé ninguna actividad delictiva”.
Además, defendió su actividad citando el marco legal de la OIT (Organización Internacional del Trabajo) sobre la prostitución y criticó la exposición pública de su vida privada que surgió de los allanamientos judiciales.
“Mis servicios y profesión, reitero, a pesar de mi extraordinaria publicidad y reconocimientos, tienen la peculiaridad de ser excluida como asunto impositivo. Pero mis ganancias económicas a lo largo de todos estos años no pueden considerarse como un hecho delictual”.
“Fui expuesta a todo tipo de prejuicio y vejamen. Publicaron objetos vinculados a mi intimidad y privacidad”.
“La finalidad era otra muy puntual y concreta: demonizar y cosificar mi figura de mujer”.
La modeló también reclamó la devolución de los objetos personales que la justicia le confiscó durante los allanamientos.