65 muertos. Pertenecían a una secta religiosa en Kenia. Encontrados en una propiedad de su líder espiritual.

Estaban en fosas comunes. Eran forzados para que ayunaran hasta la muerte.

La cifra de muertos en los terrenos del líder de una secta religiosa en el litoral de Kenia ascendió a 65.

Los cuerpos estaban enterrados en las fosas comunes, dentro de unos terrenos propiedad de Paul Mackenzie Nthenge, autoproclamado líder de una secta del condado de Kilifi.

Esta en cárcel bajo sospecha de influir a sus seguidores, que eran forzados para que ayunaran hasta la muerte.

La Policía también detuvo a un hombre identificado como coautor intelectual y aliado de Mackenzie.

El detenido, identificado como el pastor Zablon wa Yesu, fue hallado leyendo una Biblia en el extenso terreno donde se realizaron las investigaciones.

La Policía también rescató a 9 personas que ayunaban, 5 de ellas en estado crítico que fueron trasladadas a un hospital cercano.

El presidente de Kenia, William Ruto, prometió tomar medidas contundentes contra movimientos religiosos «turbios», después de que la policía encontrara más cadáveres de personas sospechosas.