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«No me falte el respeto doctor», respondió el funcionario judicial ante la respuesta a una de sus preguntas.
En la declaración del presidente Alberto Fernández como testigo en la causa de la obra pública que involucra a la vicepresidenta Cristina Kirchner y al empresario Lázaro Báez hubo momentos de tensión entre el mandatario y el fiscal del caso Diego Luciani.
El fiscal presentó una planilla en la que se puede advertir un sobrante de 75 millones de pesos. Luciani le preguntó a Fernández, quien reaccionó ante la insistencia de si conocía o tenía información.
“Ah pero entonces tiene un problema de comprensión”
“No me falte el respeto, Doctor”
“Acá hay una inquietud en particular sobre una columna que integra un anexo de la ley de presupuesto y la intención era que aclare a partir de la lectura de esa información, respecto de esa obra”.
“De ningún modo quise faltarle el respeto, quise ser descriptivo. Esto lo que dice es en una planilla recursos que se destinan a una obra. ¿Qué pretende que le diga? No tengo la menor idea. Me podría preguntar por todas las otras, tampoco tengo la menor idea”
“¿Cómo es posible que esto suceda?”
“La pregunta es para conocer la verdad de los hechos”
“en esa planilla dice que en el Presupuesto se autorizó un gasto de 150 millones de pesos y esa obra ya había sido adjudicada a 225 millones de pesos. Lo que tenemos es un sobrante de 75 millones de pesos que es posible que el testigo conozca sobre esto o no. Si dice que no lo conoce, se terminó. La pregunta es conducente porque hace al descubrimiento de la verdad”
“No tengo idea y no es tan simple de analizar. No tenía presente ninguna de las obras, no sé qué pasó después. Puede haber distintas explicaciones”.
“¿Podrá dar alguna de esas explicaciones?
“No puedo explicar algo que no conozco”, respondió Fernández.
TRIBUNA ABIERTA