Isabel II siempre le negó a su hijo esa posibilidad y jamás los invitó.
Es primera Navidad de la familia Real británica sin la reina Isabel II. Con la llegada al trono de su hijo, Carlos III , van a comenzar algunos cambios en las tradiciones, como la presencia de los hijos de su esposa, la reina consorte Camila.
Siguiendo la costumbre de que la Nochebuena se pase en Sandringham, el monarca decidió ocupar todas las sillas de la mesa. Estarán con ellos tanto Tom Parker Bowles como su hermana, Laura Lopes.
Según han explicado desde el periódico The Telegraph, tanto Thomas, de 47 años, como Laura, de 44, ambos del primer matrimonio de la reina Camila con el oficial Andrew Henry Parker Bowles y que siempre han preferido mantener un perfil bajo con respecto a su posición, acudirán acompañados tanto por sus parejas como por sus hijos.
Tom, escritor y crítico gastronómico, está casado desde 2005 con la editora de moda Sara Buys y tiene dos hijos, Lola y Frederick, de 15 y 12 años.
Laura, conservadora y comisaria artística, está casada con el contable Harry Lopes y tienen tres hijos, Eliza, de 14 años, y los gemelos Gus y Louis, que cumplirán 13 años el próximo 30 de diciembre.
Será la primera vez que la familia de Camila celebre tan importantes fechas junto al resto de los Windsor. Isabel II siempre le negó a su hijo esa posibilidad y jamás los invitó.
“La reina consorte Camila está muy emocionada de que su familia sea el centro de atención de estas Navidades en Sandringham y más teniendo en cuenta que el rey Carlos III ha tenido que prescindir de la presencia de Harry y Meghan”, aseguró una fuerte cercana a La Firma al diario The Sun.