Ahora reclama una indemnización por daños psicológicos y medidas de alejamiento por presuntos “actos de acoso”.
El rey emérito Juan Carlos reclamó la inmunidad legal en Inglaterra hasta su abdicación en 2014, en un intento de mitigar una demanda por acoso presentada por su expareja cuando aún estaba con la reina Sofía.
Un caso que otra vez en ele centro de la escena por la publicación de un polémico podcast sobre su romance.
Tres jueces del Tribunal de Apelación de Londres escuchan durante todo el día a los abogados del exmonarca español, de 84 años, y de la empresaria germano-danesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein, de 57 años, con quien mantuvo una relación entre 2004 y 2009.
Los magistrados no se pronunciarán, sin embargo, hasta dentro de varias semanas, reportó la agencia de noticias AFP.
La mujer, divorciada de un príncipe alemán y también conocida por su apellido de soltera Larsen, presentó en 2020 una demanda civil por acoso en la capital británica, donde vive, en la que denuncia 8 años de amenazas, intrusiones, seguimiento, pirateo y difamación por parte del monarca emérito.
Según la empresaria, la hostigó desde 2012 para recuperar “regalos”, que incluyen 65 millones de dólares, y por ello reclama una indemnización por daños psicológicos y medidas de alejamiento.
No obstante, no hay riesgo de cárcel o extradición para el padre del actual rey español Felipe VI.
El monarca emérito, que vive desde hace dos años exiliado en los Emiratos Árabes Unidos tras denuncias de sospechas de blanqueo y corrupción en España, niega las acusaciones.
Su equipo jurídico defiende desde 2021 que no puede ser juzgado en Inglaterra en virtud de la ley británica de inmunidad del Estado de 1978.
Un juez de la Alta Corte de Londres le denegó dicha inmunidad en marzo pasado, al argumentar que tras su abdicación en 2014 dejó de ser miembro de la casa real, e incluso señaló que ante sus presuntos “actos de acoso” no se beneficiaría de dicha protección.