Luego de que el juez federal Julián Ercolini procesara a Diego Lagomarsino como partícipe necesario del asesinato del fiscal Alberto Nisman por proporcionar el arma ilegal que se utilizó en su muerte, el técnico informático declaró que “buscan una forma de cerrar la causa”. Además, expresó: “Va a ser imposible de probar porque eso no existió”.
“Lo niego rotundamente. No es lo que pasó, yo no tengo nada que ver”, comenzó diciendo Lagomarsino. Luego, admitió: “Estoy hecho mierda. Mi vida ya no es la de antes, pero la fuerza me la dan esos dos pibes que tengo ahí dentro”, refiriéndose a sus hijos. Asimismo, alertó: “Yo no creo que a Alberto lo hayan matado”, aunque reiteró que el fallecido fiscal no tenía un perfil suicida y que el caso podría tratarse de un suicidio inducido.
“Nisman pidió armas a dos personas antes que a mí. Alberto intenta tener un arma a través de un comisario, luego de un custodio y luego me la pide a mí. La cuenta bancaria habla de la relación que Nisman tenía. Ya mostré todo”, explicó. Y añadió: “¿Acaso creen que Nisman es tan pelotudo como para dejar la puerta abierta?”.
“Soy inocente, al ser inocente es lógico tener miedo de ir preso”, expresó el técnico informático, quien sufrió un embargo 15 millones de pesos, la inmovilización de sus cuentas bancarias y continuará con tobillera electrónica. En su resolución, Ercolini determinó que Lagomarsino dejó de ser “facilitador” del arma con la que murió Nisman y pasó a ser una “pieza clave” del hecho. Lo que sí descartó el juez es que fuera el autor material del homicidio del fiscal.
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