Santo en la Web y en la Red

28 de marzo, 2024

Marruecos. Mohamed VI, un rey divorciado, con problemas de salud y con un heredero en formación.

Preocupación por su salud y la influencia de la madre en el hijo.

Mohamed VI celebra su 59º cumpleaños y su salud no atraviesa su mejor etapa. Tampoco el rey de Marruecos no quiso celebrar este pasado mes de junio su entronización como en años anteriores.

Mohamed VI continúa cumpliendo con sus obligaciones mientras forma a su hijo para que algún día sea él quien se encargue de sustituirle.

Una formación que requiere gran disciplina y que se parece a la que tuvo él en su día, formándolo como profesional, como hombre y como futuro rey.

Mohamed VI llegó al trono tras la muerte de su padre en 1999. Era el segundo de sus hijos, el primero de los varones. Fue un cambio de poder tranquilo, planificado y que se produjo siguiendo las normas y los protocolos.

Habla español, igual que sus hermanos, gracias a que una institutriz se lo enseñó siendo niños. También puede mantener fluidas conversaciones en inglés, francés.

} En 1985 se licenció en Derecho y más adelante, en Ciencias Políticas. En 1993 obtuvo un doctorado en la Universidad de Niza.

Con 38 años, en 2002, se casaba con la joven Salma Bennani, de 24, una gran celebración que duró tres días.

Supuso un gran cambio en las tradiciones mantenidas hasta la fecha, pues no solo se pudo fotografiar a la novia antes del gran día, no se supo de la existencia de la mujer del monarca anterior hasta el nacimiento de su primera hija.

Lalla Salma, como pasó a llamarse tras el casamiento, recibió el título de Alteza Real y consideración de princesa.

Tuvieron dos hijos: el príncipe heredero Moulay Hassan, que nació un año después de la boda, y la princesa Lalla Khadija en 2007.

Se separaron en 2018. La noticia se hizo pública el día que tendrían que haber celebrado su decimosexto aniversario de boda y unas semanas después de que el monarca tuviera que ser intervenido del corazón.

La ausencia de su mujer en las fotografías compartidas hicieron saltar todas las alarmas sobre una posible crisis matrimonial que se demostró cierta con el tiempo.

No son pocos los problemas de salud que el monarca lleva tiempo arrastrando y preocupan sobre todo aquellos relacionados con el corazón.

Ha sido operado en dos ocasiones de arritmia cardíaca y su fatiga es evidente en muchas de sus apariciones públicas, con dificultades para respirar, pues también padece una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

También tuvo que ser intervenido para operarle de un tumor benigno en un ojo y, como les ha sucedido a otros miembros de la realeza, él también dio positivo en coronavirus.

Su salud hace tiempo que preocupa a los medios locales, pues en más de una ocasión ha tenido que cancelar sus planes y sus citas internacionales por esta causa.

Una situación complicada que dejaría a su hijo en el trono a una edad muy temprana y con parte de su formación todavía pendiente.

El príncipe heredero tiene tan solo 19 años y no entra en los planes de nadie que sustituya a su padre de momento, sobre todo por la estrecha relación que mantiene con su madre y la gran influencia que esta, según los rumores, ejerce sobre él.

Está estudiando Gobernanza, Ciencias Económicas y Sociales en una universidad privada, la Politécnica Mohamed VI.

Además del árabe clásico, en el que está escrito el libro sagrado, aprendió también el francés, el inglés y el español, en su caso no de una niñera nativa.

Su padre se ha encargado de que desde pequeño aprenda el oficio de rey.

Seguir leyendo