Un brote de influenza aviar afectó en forma masiva al menos a dos granjas avícolas del país.
Un establecimiento en la provincia de Río Negro registró la muerte de 220 mil gallinas por la infección y el posterior “despoblamiento sanitario”.
Esto es, el sacrificio de los animales al que se procede una vez detectado el brote.
En Mar del Plata otra granja reportó el deceso de más de 20.000 aves, todas a partir del mismo procedimiento, toda vez que se detecta la infección.
El secretario de ganadería de la provincia, Tabaré Bassi, informó que el brote se ubicó en uno de los galpones del lugar destinado a la producción avícola, pero el procedimiento preventivo se aplica por protocolo en todos los que pudieran ser afectados.
Una situación similar había sido informada en la provincia de Neuquén, donde también fue detectado un brote en una granja de la localidad de Senillosa. Allí fueron sacrificadas 11.000 gallinas ponedoras luego de corroborar mediante estudios de laboratorio la existencia del virus.
TRIBUNA ABIERTA