Desde hace 10 trimestres que ese gravamen a los combustibles está congelado sin actualizarse.
El Gobierno podría aumentar los impuestos al combustible líquido y al dióxido de carbono, lo que podría resultar en una nueva suba en el precio de la nafta y el gasoil en surtidores.
Estos impuestos no se han actualizado durante el gobierno anterior durante 10 trimestres consecutivos, a pesar de que deberían ajustarse cada tres meses según la inflación, así fue lo establecido en mayo de 2018 en el decreto N° 501.
La consultora Economía & Energía, aseguró que los impuestos deberían aumentar en un 377% para recuperar el atraso desde 2021, lo que se traduciría en un aumento del precio de la nafta de aproximadamente $82 por litro y $60 en gasoil, representando un incremento promedio del 8%.
Las empresas que refinan los combustibles afirman que si se actualiza el impuesto según la inflación de los últimos 10 trimestres, la nafta debería aumentar $95 y el gasoil $65, lo que equivaldría a un incremento promedio del 11%.
La Secretaría de Energía está analizando qué hacer con los impuestos. En la Ciudad de Buenos Aires, los precios promedio de YPF son: $699 para la nafta súper, $862 para la nafta premium, $736 para el gasoil súper y $938 para el gasoil premium.
En caso de darse este incremento, la nafta premium quedaría al borde de los 1.000 pesos por litro, y en el caso del gasoil premium, lo superaría.
En los últimos dos meses, los precios de los combustibles han subido un 155% en promedio, con un litro de nafta súper de YPF que costaba alrededor de $275 antes del balotaje del 19 de noviembre. Ahora vale $700 en la Ciudad de Buenos Aires.