En algunas ciudades del interior el aumento alcanza el 9,7%.
Los precios de los combustibles debían permanecer congelados hasta el 31 de octubre según el acuerdo con las empresas de ese sector que Sergio Massa había anunciado en el mes de agosto.
Ante los números de la inflación y aumento del dólar, las petroleras no esperaron por el plazo acordado para subir sus precios y evitar el desabastecimiento.
Luego de los resultados de las elecciones generales YPF dio el primer paso y subió el valor de sus combustibles entre un 3 y un 5%.
Ahora le siguieron en esa misma linea las otras refinadoras Raizen (Shell) y Axion (PAE) y Puma (Trafigura) que aumentaron sus combustibles en el orden del 3% y que en algunas ciudades de interior llegan al 8 y al 9,7%, como es el caso de San Luis y Santiago del Estero.
Sin embargo a diferencia de YPF, las otras compañías ya habían realizado 2 ajustes anteriormente durante el periodo de congelamiento.
Desde el Ministerio de Economía aseguraron que “El acuerdo de precios sigue vigente y se van a reunir en las próximas semanas”.
