El Pontífice pide perdón en nombre de la Iglesia Católica por abusos, golpizas y malos tratos recibidos por niños indígenas.
El papa Francisco llegó a Canadá para iniciar una visita de 6 días, está marcada por el pedido de perdón a los pueblos indígenas por los abusos cometidos en internados manejados por la Iglesia entre fines del siglo XIX y la década de 1990.
Se encontrará con familiares y sobrevivientes de las denominadas escuelas residenciales.
Con el lema “Caminando juntos”, el pontífice inició una “peregrinación penitencial”.
El Papa mantendrá encuentros con representantes de los pueblos Métis, First Nations e Inuit, que sufrieron todo tipo de abusos en las escuelas residenciales financiadas por el Estado canadiense y gestionadas en algunos casos por instituciones de la Iglesia católica y de otros grupos cristianos.
El Papa fue recibido por el premier Justin Trudeau y por representantes de los grupos indígenas, que le dedicaron canciones típicas en la ceremonia de bienvenida en el hangar principal del aeropuerto.
El Papa saludó y besó la mano de una de las sobrevivientes de los internados, Alma Desjarlais, parte del pueblo Frog Lake de los First Nationd y esposa del gran cacique Greg Desjarlais, jefe de una de las confederaciones indígenas.