Oscar Domínguez, dueño de uno de los autos apedreados en la autopista Buenos Aires-La Plata por los manifestantes de las organizaciones Barrios de Pie y Aníbal Verón, contó que lo golpearon, lo insultaron y le rompieron la camioneta: «Fue sorpresivo lo que pasó. Salieron personas desde los costados de la autopista y me empezaron a romper la camioneta».
Cerca del mediodía, Oscar salió del peaje de Dock Sud y, a los pocos metros, un colectivo de larga distancia lo impactó. Luego, un grupo de manifestantes se abalanzó sobre su vehículo y empezó a romperlo. «Les intenté explicar que me habían chocado, que no quise pasar el corte, pero no me escucharon«, sostuvo.
Domínguez terminó con heridas cortantes en la cabeza, el cuello y una de sus orejas. Sin embargo, se lamentó por su vehículo, que es su herramienta de trabajo: «La camioneta no sirve más, tengo ganas de llorar y gritar. Siento mucha impotencia».
Además, agregó: «Quiero tener un país como la gente pero con estas personas no vamos a poder nunca».