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29 de marzo, 2024

Príncipe Andrés del Reino Unido. “Paedo home”-“Hogar de un pedófilo”. Pintadas en uno de los palacios reales.

El hijo de la reina Isabel II tiene la peor imagen de toda la realeza europea.

Hay un descontento generalizado en Reino Unido por el duque de York y su implicación en el conocido como escándalo Epstein.

La Corona británica lo que no esperaba es que la polémica protagonizada por el tercer hijo de la monarca llegara a afectar de forma física a las propiedades reales.

Holyroodhouse, uno de los palacios de Isabel II, en el que han aparecido pintadas.

Los muros exteriores de este palacio escocés amanecían con pintadas de color blanco, con el duque de York como objetivo. “Paedo home” -‘hogar de un pedófilo’.

No se trata de una casa cualquiera. Es una de las diferentes residencias oficiales a disposición de Isabel II repartidas por suelo británico.

No es en la que más tiempo pasa, apenas una semana al año a principios de verano, se trata de un lugar histórico, con casi nueve siglos de antigüedad.

La policía buscar dar con quienes hicieron las pintadas. No por el contenido de las mismas, del que no se ha comentado nada, sino por haber alterado la imagen de una joya del patrimonio cultural del país.

Este acto de vandalismo es una muestra más de lo deteriorada que está la imagen del príncipe Andrés desde que saliera a la luz el escándalo Epstein y se conociera su vinculación con él.

Virginia Giuffre, la mujer que lo acusa de haber abusado de ella siendo menor, le interpuso una demanda por la que tendrá que sentarse en el banquillo.

Pero tener que ir a juicio y declarar ante el juez no es el único efecto negativo para el duque de York que ha tenido estar implicado en la trama Epstein.

Aunque ha contado con el respaldo personal de la reina Isabel desde que se conociera su posible vinculación, las decisiones oficiales han ido por otro camino.

La semana pasada la monarca tuvo el primer gran gesto contra su hijo: le retiraba todos los honores militares y los patrocinios reales.

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