El duque de Sussex no ocupará una posición destacada en el gran evento.
El príncipe Harry tuvo una “conversación sincera” con su padre antes de aceptar la invitación a la coronación.
El hijo menor del rey estuvo semanas en contacto con el Palacio de Buckingham discutiendo asuntos relacionados con la seguridad del evento y con el papel y el lugar que ocuparía él, pero faltaba esa charla privada con el rey.
El príncipe accedió a asistir a la coronación que tendrá lugar el próximo 6 de mayo ante 2.000 personas en la abadía de Westminster y quiere “mostrar apoyo a su padre”.
También han afirmado que el rey Carlos III está “feliz” con la decisión de su hijo y que “entiende” que Meghan haya decidido quedarse en casa con los niños porque el cuarto cumpleaños de Archie coincide con el día de la ceremonia. Aseguran que hay una “voluntad y deseo de reparar las heridas en ambos lados”, aunque se desconoce si esa voluntad se extiende al distanciamiento existente entre Harry y William.
Los hermanos no hablaron desde que salió publicado su libro de memorias, ‘Spare’, en el que lo criticó duramente incluso acusándolo de haberle agredido físicamente.
El rey Carlos III consideta la coronación como la oportunidad perfecta para sanar las divisiones familiares y provocar el acercamiento entre los miembros de su familia, sobre todo entre sus hijos.
En cuanto al papel de Harry durante la coronación, tras renunciar a ser miembro activo de la realeza, el duque de Sussex no ocupará una posición destacada en el gran evento.
Tampoco se prevé que participe en la procesión de regreso al palacio de Buckingham o que participe en otros eventos durante el fin de semana.
A pesar del apoyo de Harry a su padre, se espera que la coronación resulte incómoda para la familia real británica debido a las profundas divisiones creadas por las declaraciones que tanto Harry como Meghan han realizado en la serie documental que protagonizaron en Netflix, en distintas entrevistas y en las memorias del príncipe.
