Denuncia por 100 millones de pesos contra el laboratorio británico y la ANMAT.
Después de que la empresa AstraZeneca reconoció efectos secundarios de su dosis de la vacuna contra el COVID y comenzó a retirarlas del mercado, una mujer oriunda de Córdoba realizó la primera denuncia contra el laboratorio británico y el Estado argentino por 100 millones de pesos.
Se trata de una mujer de 39 años de la ciudad de Río Cuarto, que denunció haber quedado incapacitada en un 75% laboralmente luego de haber recibido la tercera dosis de esa vacuna en enero de 2022.
En la presentación, agregó que empezó a experimentar fuertes calambres e inestabilidad en las piernas y su médica le informó que podría tratarse de un efecto adverso tras la inoculación. Le suministraron decadrón y diclofenac para mitigar el dolor y más tarde le diagnosticaron síndrome de Guillain Barré con cuadriparesia.
Este síndrome es una afección del sistema nervioso periférico, que incluye un conjunto de trastornos autoinmunes con una parálisis flácida simétrica muy progresiva en las extremidades, con una caída marcada o ausencia en los reflejos.
La denuncia indica que la damnificada fue evaluada por una comisión médica de la ciudad cordobesa después de haber pedido un retiro por invalidez. Tras examinarla, concluyeron en que presentaba una incapacidad laboral del 75,6%.
“Me arrebataron la vida. Soy madre de un nene de 5 años, jamás fui informada y tampoco se me advirtió que podría sufrir efectos adversos, como asimismo de los riesgos/beneficios de la inoculación“, manifestó la mujer en la presentación. “No hubo un verdadero consentimiento de mi parte, solamente nula información y coacción“, agregó.
Entonces, acudió al Juzgado Federal de Río Cuarto para demandar por presuntos daños y perjuicios a AstraZeneca y la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) por unos 100 millones de pesos.