El presidente Lula da Silva estuvo en la zona afectada.
El estado brasileño de Rio Grande do Sul sufrió el “peor desastre climático” tras un intenso temporal.
Según las autoridades, el saldo de 29 muertos en el territorio se incrementará.
El gobernador ‘gaúcho’, Eduardo Leite, lamentó las muertes contabilizadas y estimó que son “muchas” las que aún no fueron registradas, tras deslizamientos e inundaciones en localidades aisladas.
Los desaparecidos ascienden a 60.
El presidente Lula da Silva prometió que “no faltarán recursos” humanos ni materiales para “minimizar el sufrimiento que este evento extremo de la naturaleza está causando en el estado”.
”El gobierno federal estará 100 por ciento a disposición del estado” para las tareas de rescate y reparación, añadió Lula junto a Leite, tras llegar junto a una comitiva de ministros a la localidad de Santa María, uno de los municipios afectados por las intensas lluvias.
Las lluvias golpearon a 147 municipios y han dejado además 12 heridos y 67.860 afectados. Unas 9.993 personas fueron desalojadas.
