Se la vio luego de la infección que la tuvo lejos de los actos oficiales.
La visita de Estado al Reino Unido del jeque Tamim bin Hamad Al Thani y la primera de sus tres esposas, Jawaher bint Hamad bin Suhaim Al Thani, hizo que Camilia volviera a los actos oficiales después de sus problemas de salud.
Pese a que la jornada empezó con la ausencia de Camila, quien todavía se encuentra algo indispuesta por su infección.
Pero en el palacio de Buckingham Camila sí se ha incorporó a la cena de gala. Para tal ocasión, escogió el vestido de terciopelo rojo de Fiona Clare, marcado por mangas sueltas y una falda plisada.
Camila aprovechó la ocasión para utilizar por primera vez la tiara Kokoshnik, una de las favoritas de Isabel II.
Una pieza formada por setenta barras de platino con 488 diamantes incrustados, inspirada en los tradicionales tocados rusos. Fue un regalo que una aristócrata le hizo a la reina Alejandra, esposa del rey Eduardo VII, con motivo de la celebración de sus bodas de plata. Como la diadema fue (supuestamente) un presente del pueblo británico, pasó a formar parte de la colección real.
Camila también escogió otra de las piezas favoritas de Isabel II. Se trata del collar con flecos de la ciudad de Londres, una pieza creada por la difunta Reina. Por otro lado, los pendientes sí que pertenecen a su colección privada y los ha acompañado por las dos órdenes que ostenta.
Junto a ella, también se encontraba Jawaher bint Hamad bin Suhaim Al Than, primera esposa del jeque. En su caso, optó por un estilismo más tenue con un vestido con capa de mangas abiertas en tono burdeos, el color de la temporada.