Santo en la Web y en la Red

26 de julio, 2024

Carlos y Camila. El déjà vu de su coronación. Acto con capas históricas y 2.000 invitados.

El rey volvió a todas las actividades.

Carlos III volvió al trabajo con un ritmo frenético. Al retomar su agenda oficial, después de seguir el consejo de su equipo médico debido a los buenos resultados de su tratamiento contra el cáncer, nadie pudo imaginar que el rey regresaría a todos los actos.

Asistió a la inauguración de un nuevo retrato en el palacio de Buckingham y también a una investidura en Windsor, ha querido presidir un un servicio de dedicación de la Orden del Imperio Británico

Superando incluso el número de actos de su hijo William.

Carlos y Camila fueron a la catedral de San Pablo tras ser recibidos por el alcalde de Londres, Michael Mainelli, ambos han accedido al interior del templo religioso en calidad de Soberano y Gran Maestra de la Orden.

Los esperaban un total de 2.000 invitados de todas partes del Reino Unido y la Commonwealth, todos ellos poseedores de premios de la OBE.

Estas condecoraciones reconocen el trabajo de personas de todos los ámbitos dándoles el honor de ostentar los títulos de Caballero o Dama.

Carlos III y Camila presiden el servicio religioso en honor a la Orden del Imperio Británico.

Este acto de carácter histórico tiene numerosas similitudes con la coronación de Carlos III, celebrada el pasado 6 de mayo de 2023.

En este caso, nada tiene que ver con la elección de una de las catedrales más importantes de la ‘Big City’, su asistencia multitudinaria o su retransmisión por televisión, sino más bien con las imágenes y atuendos.

Los reyes del Reino Unido, siguiendo el estricto protocolo del evento, han lucido los conocidos como mantos de la Orden.

Se trata de unas túnicas de color salmón confeccionadas en seda carmesí y con un interior forrado por el mismo material, pero en tonalidad gris perla. Además, sobre estas reposan la estrella de la OBE en el pecho izquierdo de la que parte un collar frontal que finaliza en el hombro opuesto, sujeto con un lazo blanco.

A estas piezas, destacadas por sus tejidos púrpura y sus bordados en hilo de oro, se unió la corona imperial.
De esta manera, los reyes del Reino Unido han vuelto a revivir en parte, o al menos han logrado provocar un déjà vu, el día más importante y especial de sus vidas.

Seguir leyendo