Tiene esquizofrenia aguda y fue condenado a muerte por el asesinato de sus exsuegros.
Un hombre con esquizofrenia aguda y condenado a muerte por el asesinato de sus exsuegros en Texas en 1992 no podrá ser ejecutado a causa de su enfermedad.
Así lo dictaminó un tribunal federal de este estado de Estados Unidos, tras 20 años de debate, en un caso de impacto nacional del que incluso se involucró la Unión Europea pidiendo su indulto.
Scott Panetti, de 65 años, fue condenado a muerte en 1995 por disparar contra los padres de su exesposa.
“Es indiscutible que Panetti padece una enfermedad mental grave y sufre esquizofrenia crónica desde hace más de cuarenta años”, dijo el juez de Austin, capital de Texas, Robert Pitman, después de tres días de audiencia.
“La enfermedad mental de Panetti le impide comprender racionalmente las razones del Estado para ejecutarlo”, agregó.
Esta decisión “impide al estado de Texas vengarse de una persona que sufre una forma profunda y grave de esquizofrenia que le hace percibir el mundo que le rodea de forma distorsionada”, afirmó ayer su abogado, Gregory Wiercioch, en un comunicado.
En septiembre de 1992, Panetti irrumpió en la casa de los padres de su exesposa y los mató a tiros. Tomó como rehenes a su esposa y a su hija de tres años durante la noche antes de entregarse a la policía.
Panetti había sido hospitalizado más de una docena de veces antes de los asesinatos por alucinaciones y episodios psicóticos.