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26 de julio, 2024

Felipe y Letizia. A 20 años de su casamiento. La esmeraldas misteriosas, brillantes y perlas centenarias que usó la reina.

También la madre del rey.

Se cumplen 20 años de la boda del casamiento de los reyes Felipe y Letizia. Una jornada para el recuerdo que comenzó la noche anterior con una cena ofrecida por don Juan Carlos y doña Sofía en el Palacio de El Pardo y que se convirtió en un auténtico desfile de alta costura y sobre todo de grandes joyas.

Tanto la novia como algunas de las invitadas más ilustres, como la madrina o las infantas, rescataron algunas de las joyas más importantes de la historia de la realeza española para aderezar sus estilismos.

La reina Letizia se convirtió en Princesa de Asturias con unas joyas cargadas de historia y homenajes. Sobre todo, hacia su suegra. La por entonces prometida de Felipe VI escogió la apodada tiara Prusiana, un diseño de estilo neoclásico decorado con columnas, hojas de laurel y llaves griegas creada por el joyero de la corte alemán, Koch, para la hija del káiser Guillermo II, princesa Victoria Luisa, con motivo de su boda con el príncipe Ernesto Augusto de Hannover en mayo de 1913.

Una pieza que llegó a manos de la familia real griega tras la boda de la princesa Federica con el príncipe Pablo de Grecia y Dinamarca en 1938, padres de la reina Sofía. Fue esa tiara la que ella escogió para su boda con don Juan Carlos en Atenas en 1962.

Hasta la boda, las infantas Elena y Cristina la usaron en varias ocasiones, aunque desde entonces tan solo la ha lucido la actual Reina. La última vez fue en 2011 y se espera que algún día la luzca su hija, la princesa Leonor, que será la quinta generación en hacerlo.

 Esta tiara no fue la única joya que llevó. Letizia aderezó el look nupcial con los pendientes que le regalaron sus suegros en la pedida: dos aros de platino con seis diamantes talla pera engarzados y cuatro diamantes talla brillante, dos de 1,22 quilates y otros dos de 4,54 quilates. Los ha lucido en multitud de ocasiones, como los premios Princesa de Asturias 2019 o la boda de Victoria de Suecia en 2010.

Además de la alianza, también llevó ese día el anillo que le regaló su prometido para sellar su compromiso. Una joya de oro blanco con dieciséis diamantes cortados en baguette diseñado por los joyeros Suárez que dejó de usarla pocos años después de su boda. Se ha dicho en multitud de ocasiones que fue Iñaki Urdangarin, el ex marido de la hermana del rey que terminó preso,  el encargado de ir a recoger la pieza al joyero.

La madrina la reina Sofía, también lució algunas de las grandes piezas de su histórico joyero para convertirse en una de las invitadas más elegantes en la boda de su hijo. Era la única vez que podía ejercer de madrina, por lo que no se dejó nada en el tintero.

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