Sus nietas ya están grandes y su hija no requiere de su ayuda.
La madre de la reina Letizia y abuela de la princesa de Asturias y la infanta Sofía ha decidido emprender una nueva etapa en su vida, lejos de Madrid y del entorno familiar de la Casa Real.
La enfermera jubilada se ha mudado junto a su pareja, Marcus Brandler, a la tranquila localidad de Los Belones, situada en el municipio de Cartagena, en Murcia.
Esta mudanza es de carácter temporal, aunque ha causado revuelo por la notable distancia que ahora separa a Paloma Rocasolano de su hija y sus nietas.
La madrileña, quien ha estado presente en los momentos más importantes de la vida de Leonor y Sofía, parece haber encontrado en Los Belones un refugio ideal para disfrutar de una vida más relajada y discreta.
Instalada en su nuevo hogar, la madre de la reina Letizia ha logrado integrarse perfectamente en la comunidad local.
Rocasolano disfruta de actividades sencillas y cotidianas, como pasear por la playa Las Mulas.
Además, frecuenta comercios del pueblo, como una carnicería y una peluquería, donde es reconocida, pero respeta su deseo de pasar desapercibida.
La decisión de mudarse a Murcia coincide con un momento de mayor independencia para la reina Letizia, cuyas hijas ya no requieren la misma atención constante.
Durante años, Rocasolano se trasladaba al Palacio de la Zarzuela para cuidar a sus nietas cuando los Reyes debían viajar al extranjero.
En la actualidad, con Leonor inmersa en su formación militar y Sofía cursando el bachillerato internacional en Gales, la abuela disfruta de mayor libertad para viajar y compartir su tiempo con su pareja, el empresario británico con quien mantiene una relación desde hace tres años.