Santo en la Web y en la Red

26 de julio, 2024

Martha Wolff. De argentina me convertí en correntina.

Esta crónica de mi paseo por primera vez a Corrientes fue de agradecimiento a las Naturaleza por su esplendor en esa tierra comparada con la catástrofe que hoy sufre por los incendios. Rescatarla es como una oración rezar para que pronto vuelva a ser lo que fue.  Ante mi angustia me comuniqué con una gran cocinera de Concepción del  Yaguareté Corá, de los Esteros del Iberá, Reyna Sandoval, cuya casa era su negocio para dar comida típica. Ella es muy famosa  y hoy tiene un restaurant al lado de su vivienda y es una cita obligada para disfrutar de sus manjares dando trabajo a mucha gente. Llorando me contó del drama, de los negocios cerrados, de la falta de turismo y del tiempo que llevará recuperar esa  fuente de trabajo. Vayan mis  bendiciones.

Estuve por primera vez en Corrientes.

Fui con una amiga correntina hasta el tuétano.

Por su cumpleaños me hizo el regalo de invitarme a conocer su lugar de nacimiento, su familia, su casa de infancia, sus amigos, lo que fue el negocio de sus padres, su escuela primario, su colegio secundario, la Universidad donde se recibió de abogada, sus lugares de trabajo,  adónde iba bailar con su barrita, sus lugares preferidos y el río, ese río en el nadaba, andaba en canoa y acompañaba en sus caminatas por la costanera.

De entrada tuve que poner antenas ante tanta información, presentaciones, señalamiento de lugares y datos y más datos mezclados con expresiones en guaraní. Ese idioma que fue declarado por el gobierno correntino, en el año 2004, como idioma oficial alternativo en la provincia junto al castellano, siendo la primera provincia argentina en reconocer un idioma oficial, el guaraní. Ese contingente de peregrinos y guerreros que bajaron del Río Amazonas hacia las tierras del Río Paraná. Esa lengua que impuso el nombre Taragüí a Corrientes como todas las poblaciones cercanas que no fueran guaraní con el aditamento de un calificativo con nombre de plantas, árboles a animales y a la ciudad le pusieron Teyú Taragüí, equivalente a lagartija, pero que oficialmente como Provincia de Corrientes se llama Taragüí  TeTaminí.

Creo que cuando llegamos no besó la tierra pero lo hizo con su corazón. Hija de inmigrantes judíos que comenzaron de la nada y que lograron progresar y aportar el desarrollo de este país, sentí que había llegado a la Tierra Prometida. Y comenzó a aparecer el nombre de Osvaldo Sosa Cordero, máxima figura del folklore argentino y por su música litoraleña como tangos, milongas, candombes y creador de lo que pasé a considerar el himno correntino que es el poema “Chamigo” al que Antonio Tarragó

Ríos le puso amigo que dice: 

“CHAMIGO”!.
Es el típico saludo que
usamos los correntinos
Chamigo quiere
decir literalmente
“Mi Amigo”
Aunque el rigor de verdad
Ello se halla enriquecido
De todo cuanto contiene
De Fraterno, de afectivo

El chamigo es algo más 
Que lo común de un amigo
Es esa mano que estrecha
Con impulso repentino
Es la voz que en ocasiones
Nos hace como de estímulo
Dándole fuerza al elogio
“Estuviste bien chamigo”
(y salteando versos termina diciendo):

no crea usted que el chamigo 
se le prodiga a cualquiera
No señor!.,
ese es un rito que se practica 
tan sólo cuando se halla reconocido
el real afecto, de aquellos que se consagran amigos
por eso sin prevenciones 
confíe en el correntino,
cuando corazón en mano se le entrega en un
¡“CHAMIGO”!

Y de golpe sentí un afecto por esa gente que me convertí en ciudadana correntina por un pasaporte que dan como publicidad del Ministerio de Turismo que dice: Visto y considerando que Martha Wolff ha conocido esta tierra de poras, de lagunas y leyendas, se ha maravillado con su fauna original y deslumbrado con la belleza de su flora, que se ha deleitado don sus chamanés, sus sapucay, sus mates y el chipá, que ha disfrutado con el paisaje paradisíaco del Paraná, el Uruguay, los misteriosos esteros del Iberá, la histórica Yapeyú, y la magnitud del Yacyretá y ahora conoce más de su patrimonio, de la Virgen de Itatí, del General San Martín, del Sargento Cabral, de las cautivas y de todos sus héroes. Se le extiende el presente pasaporte.

En Corrientes se respira arte por doquier con sus murales que son la Historia de su historia de conquista de españoles, gauchos y de indígenas. Es una galería de arte al aire libre acompasada por la música chamamacera que resuena en todos los rincones, por sus museos educativos, galerías de arte de artistas plásticos maravillosos,, por la cantidad de estatuas que enmarcan la ciudad y por los eventos culturales nacionales e internacionales que se organizan.

En Corrientes el Carnaval es una sede del brasilero por su importancia popular ,porque con la directiva temática a abordar, la gente se prepara con sus mejores galas de plumas, brillos y ropajes al mejor estilo del sambodrómo de Río de Janeiro. Cabe destacar además que la enseñanza a los pequeños para el culto de las danzas típicas con sus trajes como para participar en el desfile de disfraces es casi obligatorio, para decirlo de alguna manera, por el compromiso de sus padres con la continuidad de fuerte tradición local. Y algo impagable es que todo lo correntinizan como por ejemplo en Concepción, donde fuimos para llegar a uno de los siete portales por los que se entra a los esteros, a un museo de muñecas que se llama la Pilarcita donde hay un retablo con el nacimiento del niño Jesús con José, María y Jesús, ladeados por dos parejas de gaucho y china y al pie, en vez de una oveja, hay un carpincho que habita en abundancia en esa región.  El poema que está a un costado reza. “Ya ha llegado el niño Dios a los campos correntinos y nadie sabe cuál es de todos lo que han nacido.

Por eso hemos de cuidar  igual a todos los niños. Darles pan, ropa, remedios abecedario y oficio…y al final ponen: y al cumplir los treinta y tres, yo quiero saber, chamigo si lo vamos a matar de nuevo como hace siglo. ”

Podría seguir contando tantas emociones y degustaciones de su típica comidas como MBAIPY ,que en guaraní quiere decir polenta hecha con harina de maíz blanco y rojo,  o el Guiso Carrero o Quibebe todo esto saboreado a lo largo y lo ancho de la provincia más sus pescados como el surubí y otros exquisitos. Pero, en Concepción del  Yaguareté Corá, comimos mi amiga y yo en la casa de Reyna Sandoval, cocinera del Ibera, la que fue elogiada por el Presidente Macri tanto en un hotel boutique La Jaula de los Pájaros como cuando ella aprovechó y lo convidó con sus típicos pastelitos de campo  en la plaza central y le confesó que le gustaría cocinarle en la Quinta Presidencial de Olivos a la que fue invitada. En esa ocasión con otros cocineros del Iberá fue elogiada por el Presidente de la Nación quien a sus invitados contó la lucha de esta mujer ejemplar que con sus manos crió sola a siete hijos desde la máxima humildad hasta el reconocimiento que tiene hoy defendiendo las costumbres culinarias de su provincia. Nuestra cena en su casa fue un lujo palaciego de orgullo y honor entre ladrillos y sabores sobre una mesa hermosamente decorada.

CON LA COCINERA REYNA SANDOVAL.

Para poner punto a medias final ,porque queda mucho que contar, debo destacar las diferentes regiones productivas de esta provincia con una rica agricultura, ganadería, maderera, frutícola e ictícola. Es un rincón del mundo de una naturaleza privilegiada.

CON EL GAUCHO OMAR.

Mi máquina fotográfica no descansó porque quise dejar perpetuada la imagen del gaucho que nos guió en la lancha por los esteros y la del chofer que más que un conductor fue un instructor de un mundo argentino, regional y provincial que se llama Corrientes por las siete puntas o penínsulas que sobresalen del rio y que generan fuertes corrientes de agua, fundada en 1588 por Juan Torres de Vera y Aragón llamada la principio Vera por estar a la vera del río. Quise traer a Corrientes en fotos para recordarla como una hermosa experiencia turística de mi país.

Antes de partir con este bagaje tan rico me despedí también de los santos que habitan en cada rincón por ser  figuras populares tan veneradas como los del culto católico, pero que responden a aquellos que defendieron sus injusticias de clases para salvarlos y para pedirles ayuda tanto espiritual como física.

En fin de argentina me convertí en correntina a pesar de los mosquitos.

Invitada
Martha Wolff
Escritora y periodista

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