Desde el 7 de octubre soy otra, una luchadora de la palabra como arma para defender mi ser judía. Me abrazo al abrazo colectivo y enciendo una vela en mi corazón por la paz y los rehenes. Volvimos a ser señalados por tener el Estado de Israel apuntando contra el sionismo y a nosotros por ser judíos de la Diáspora y libres gracias a ese Estado. Amén de haber pasado escaramuzas de provocaciones y de frases insultantes los judíos argentinos fueron doblemente torturados durante la dictadura militar por serlos.
Siempre sobrevivimos por nuestra fortaleza, comunidad organizada, red de templos y activismo para seguir siendo judíos aquí y allá por la defensa de Israel que esta última vez falló.
Pero revivir el pogromo y las hordas nazis fue un volver a vivir el antisemitismo cruel de manos de terroristas preparados para no dejar con vida a nadie ni nada. Allí, aledaña a la Franja de Gaza, en la que de un lado vive un torbellino de gente esclava de Hamás que los condena al hacimiento y dependencia miserable, y del otro la cultura del trabajo de labrar la tierra, la socialización de sus habitantes, la construcción de escuelas y hogares y piezas de refugios. Esas piezas que son la prueba entre la idealización de paz y convivencia con los palestinos y por el otro el estar expuestos a ataques. Mientras los israelíes tienen refugios los palestinos están desprotegidos ya que la ayuda recibida fue para armar a los terroristas, cavar túneles y fabricar armas. Los guerreros obedecen a las prédicas de odio del imán hacia los judíos.
Lo perpetrado en la Franja de Gaza no tiene perdón. Drogados de omnipotencia religiosa y por estupefacientes como hombres lobos sedientos de sangre mataron, mataron, mataron, destruyeron, degollaron, quemaron, violaron, además de jactarse de su operación en sus celulares a sus familiares. Y no pensaron que la revancha les iba a costar muy caro. La entrada del ejército israelí en su avance lo hace con soldados como corresponde atacar en una guerra y no entrando a secuestrar convirtiendo un festival de música por la paz en un cementerio sembrado de cadáveres y llevándose rehenes para canje de prisioneros en Israel, para mostrar al mundo su poder y si fuera necesario también terminar con sus vidas.
Los terroristas actuaron con los niños que representan el futuro como con los jóvenes, viejos, mujeres obedeciendo la orden que fue matar judíos. Se jactaron a través de los celulares de sus hazañas a sus padres. Y pregunto: ¿Esos son hombres o bestias? El ejército de Israel está actuando para que los culpables paguen su crueldad escondiéndose entre la población inocente tan inocentes como los que estaban participando de una fiesta.
Amén Israel.