Santo en la Web y en la Red

19 de abril, 2024

MARTHA WOLFF. Las vivaldianas estaciones del año.

Se encuentran. Una  para despedirse y la otra para avanzar. Es un cambio rutinario desde la historia de la humanidad. En ese girar y deslizarse el tiempo, todo cambia para volver y reinar. El verano con su pertinaz sol y energía de frondosa belleza le cede el lugar al  otoño, porque necesita descansar, mitigar sus bríos, retirarse y esperar. Porque la espera es un tramo del universo que gira y en su danza de luz y sombra recibe el calor del sol. Allí al borde de una cita impostergable  el calendario cambia su  ropaje para refrescar sus meses de tórrido clima. El anuncio de sus pasos crujen bajo las hojas decoloradas agonizantes después tanto follaje y sombra.  En la tríada de meses que se suceden  van implícitas sus encantos que le dan vida, color, energía, desolación y verdor a todo lo que cubre la Tierra. Y se viven sus específicos caracteres  como amigos que invitan a saborear, oler, degustar y rechazar lenguas de frío, calor, primavera y verano.  A cada una gracias por  cumplir año tras año un nuevo ciclo de infinitas sensaciones. El verano abrazará al otoño y éste  se retirará hasta que el infinito andar del mundo en el espacio lo invite nuevamente a ocupar sus lugar. Nada mejor que poder ver con los ojos de la verdad y la fantasía ese carnaval de la naturaleza según pasan las vivaldianas estaciones del año.

INVITADA
Martha Wolff
Periodista y escritora

Seguir leyendo