Personalmente me enamoré de Mickey en un dibujo animado en el que pasaba de ser un empleado de limpieza de los estudios Disney a actor. Mickey ante su exitosa actuación tenía que ir a Hollywood a recibir un premio. Ya famoso llegaba en un coche descapotado saludando junto a su novia Minnie. Aclamados por el público entraron caminando por la alfombra roja, vestidos de gala y felices. Ese ascenso social de la pareja, símbolo de la sociedad norteamericana fue inolvidable. Así empecé a buscar sus datos: Mickey Mouse, alias el ratón Mickey, en castellano el ratón Miguelito, fue y es el emblema de la compañía Disney que tuvo dos padres: el dibujante Ub Iwerks y Walter Disney.
Este último puso la voz, le imprimió personalidad y carácter y dijo sobre lo logrado: “Su cabeza era un círculo con un círculo oblongo como hocico. Las orejas eran círculos, así podrían ser dibujadas iguales, no importa cómo moviera su cabeza. Su cuerpo era como el de una pera y tenía una larga cola. Sus piernas eran como boquillas de pipas para fumar y nosotros las colocamos en zapatos enormes, para darle el look de un niño calzándose los zapatos de su padre. No queríamos que tuviera manos de ratón, porque se suponía que era más humano. Así que le dimos guantes. Cinco dedos parecían mucho para una figura tan pequeña, por lo que le sacamos uno. Eso era un dedo menos para animar…” . Su empresa celebró su nacimiento el 21 de noviembre de 1928 en blanco y negro hasta que por la década del 40 apareció el cine color.
Mickey Mouse y Minnie Mouse desde la primera vez que aparecieron juntos en una caricatura en 1929 se enamoraron y si se casaron… lo mantuvieron en secreto. Walter Disney explicó que la historia de esa pareja de ratones del dibujo animado requería un noviazgo eterno y fue su creador quien prefirió no hacer público su matrimonio en 1933. Aunque Mickey y Minnie nunca dijeron ¡Sí quiero! ante el altar, su romance contagió a los dos actores que doblaron sus voces hasta convertirlos en marido y mujer.
Esta otra historia de amor paralela tuvo que ver con que a Mickey se lo reconoce por su tímida voz en tono falsete. Walt Disney fue el primero que prestó su voz a Mickey, pero a partir de 1947 fueron varios los que los reencarnaron. En 1977, para el show “Todo lo Nuevo de Mickey Mouse Club”, la voz fue de Wayne Allwine quien la mantuvo hasta su fallecimiento en mayo de 2009. Y curiosamente, su esposa, Russi Taylor, fue la voz de Minnie Mouse desde 1986 hasta su muerte en 2019. Ambos de tanto amor que transitaban en sus diálogos también se enamoraron y se casaron. Luego se supo que en la serie “Casa de los ratones”, Mickey confiesa su aniversario con Minnie, prefirieron no hacerlo público ya que eran personajes infantiles y los niños los imaginaban de su misma edad.
Tanto Mickey como su novia, Minnie, habían aparecido ya en el primer corto de la serie, “Avión Loco”, que se estrenó el 15 de mayo de 1928 y luego en” El Gaucho Galopeador”, parodiando una película de Douglas Fairbanks en la Pampa argentina. Mickey hacía de gaucho que montaba un ñandú o un avestruz y al llegar a la Cantina Argentina bebía, fumaba y hasta bailó un tango con una camarera Minnie, por la que se la disputaba con Pete Pata Palo, un parroquiano, con rapto y duelo de por medio del que Mickey sale victorioso al rescatarla.
De Minnie se puede decir que su verdadero nombre es Minerva Mouse y llegó para sustituir a Oswald, el Conejo Afortunado. Ella se convirtió en ídola e inspiración de niñas y mayores. En su primera aparición, Minnie apenas lucía una simple enagua blanca y su aspecto era igual a la de los de las chicas Flapper de los locos años veinte.
Con el tiempo vinieron los cambios y apareció vestida con su look famoso de vestido rojo con lunares blancos, su enagua y zapatos amarillos enormes como prestados de mamá y su lazo en la cabeza haciendo juego. También hubo transformaciones físicas y pasaron ambos a tener ojos con párpados y a modificar su temperamento asustadizo y mal carácter cuando se enfadaba por uno más dulce.
Hasta hoy siguen siendo una pareja encantadora, que a pesar de cumplir casi un siglo de existencia en el mundo de la fantasía, no dejan de transmitir armonía y felicidad saludando con sus guantes blancos al mundo de los sueños de grandes y chicos.