Venganza por que la madre no quiso vender droga.
Alan Funes, jefe de un grupo narco de la ciudad de Rosario que se encuentra preso, fue imputado por planear el asesinato de una joven que cumplía prisión domiciliaria y pagar 30.000 pesos a dos sicarios porque la madre de la víctima se negaba a vender drogas para él.
Funes, de 23 años de edad, se encuentra cumpliendo condena en la cárcel de Ezeiza por homicidio, narcotráfico y asociación ilícita. Tras su investigación, el fiscal Gastón Ávila lo señaló como autor intelectual del crimen de Mariel Lezcano, de 21, ocurrido el pasado 13 de octubre.
La joven había sido condenada a 6 años de cárcel, y se le había dictado prisión domiciliaria por comercio de estupefacientes.

El fiscal también acusó a Iván Ariel “Lolo” Gutiérrez, de 18 años, y a Fabián Alejo Domínguez, de 21, como coautores del homicidio de Lezcano. Ellos habrían recibido el dinero para llevar a cabo el asesinato, según la evidencia recolectada en un celular de una de las hermanas de Funes.
La víctima fue sorprendida por los sujetos en su vivienda, donde fue atacada a balazos. En el hecho se utilizó una pistola calibre 9 milímetros, y una motocicleta Honda Wave.
Todo comenzó luego de la negativa de la madre de Lezcano, apodada “Paquete”, para organizar y llevar adelante un búnker de venta de drogas de Alan Funes. Incluso el padre del jefe narco, llamado Jorge y conocido como “el Gordo”, había ido a su casa a amenazarla con matar a su hija si no se ponía a vender drogas para su hijo.
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