El fallecido estaba desarmado.
Los 6 policías de la Ciudad que admitieron haber efectuado disparos contra el auto de un supuesto ladrón que terminó muerto de un tiro tras una persecución en Parque Chacabuco, quedaron detenidos a la espera de peritajes y de ser indagados.
Así lo resolvieron el juez en lo Criminal y Correccional 20, Hugo Decaria, y el fiscal 47 del mismo fuero, Marcelo Solimine, luego de encabezar en el lugar del hecho las diligencias para reconstruir las circunstancias de la muerte de Iván Ezequiel Kresta Orellano (27), el supuesto ladrón que terminó muerto de un tiro en el tórax, pero que fue hallado desarmado.
Los 6 policías detenidos en una causa caratulada provisoriamente como “homicidio” son tres oficiales, dos oficiales primeros y un oficial mayor de la fuerza de seguridad porteña, la mayoría de la comisaría vecinal 7B de la Policía de la Ciudad.
Si bien todo indica que Kresta Orellano, quien además cuenta con antecedentes, venía de cometer un robo en modalidad arrebato, lo que investigan el juez y el fiscal es si hubo algún tipo de exceso o abuso por parte de los efectivos de la Policía de la Ciudad en un procedimiento que culminó con el sospechoso muerto.
Si bien seis son los detenidos, se les secuestraron las armas a un total de 16 policías porteños que participaron, de algún modo, en la persecución o las posteriores tareas que se realizaron apenas se consumó el hecho.
El juez aguarda los peritajes a esas armas para intentar identificar cuál de los policías fue el que efectuó el disparo que mató a Kresta Orellano.
Se pudo secuestrar del interior del automóvil Ford Fiesta del fallecido el proyectil que lo mató y cuyo cotejo con proyectiles testigos de las armas incautadas será clave para la causa.