Tras un allanamiento en la casa de Marcos Bazán, en la reserva Santa Catalina donde se encontró el cadáver, sospechoso por la muerte de Anahí Benítez, se encontraron una bolsa de plástico con preservativos usados y toallitas femeninas, 7 granadas lacrimógenas y municiones en gran cantidad.
Además, el equipo de ingenieros agrónomos y forenses, especialistas en flora y fauna encontraron un invernadero en donde se cultivaban hongos alucinógenos y marihuana. El sospechoso ya había declarado sobre sus cultivos y había dicho que los hongos eran para la venta y la marihuana para uso personal.
Mientras tanto el cuerpo de Anahí será sometido, por pedido del fiscal, a pruebas toxicológicas para saber si fue drogada y se esperan los resultados del arroz que estaba en una olla en la casa del detenido, mismo alimento que encontraron en el sistema digestivo de la victima.
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