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28 de marzo, 2024

Condenados a cadena perpetua. Sentencia para los asesinos de Aracelli Fulles.

Los 3 sujetos pidieron no estar presentes en el recinto donde se leyó el veredicto

3 hombres fueron condenados a prisión perpetua por el femicidio de Araceli Fulles, quien en 2017 fue hallada asesinada y con signos de haber sido asfixiada debajo de unos escombros en una casa de José León Suárez.

El fallo del Tribunal Oral en lo criminal (TOC) 3 de San Martín recayó sobre Carlos Casalz, Hugo Cabañas y Marcelo Escobedo, para quienes también se ordenó su inmediata detención, mientras fueron absueltos otros 5 acusados que habían llegado libres al debate.

Los 3 fueron considerados coautores del “homicidio agravado por mediar violencia de género” en perjuicio de Araceli.

La madre de la víctima, Mónica Ferreyra, repartió globos violetas.

La mujer estuvo acompañada de unas cien personas, entre ellas, familiares de otras víctimas, como Daiana Ojeda y Chiara Rodríguez, asesinadas en julio de 2019 y septiembre de este año, respectivamente; ambas también en José León Suárez.

“Llegó el momento de decir basta. Hoy pedimos justicia”, rezaba la pancarta que llevaba en uno de los allí presentes, mientras que, de fondo, en los altoparlantes dispuestos por los organizadores de la movilización sonaba la canción “Cómo te extraño” de Abel Pintos.

También estuvo presente Gabriel Katopodis, actual ministro de Obras Públicas de la Nación y quien fuera intendente de San Martín al momento del crimen de Araceli.

Los imputados pidieron no estar presentes en el recinto y así lo hicieron a pesar de que el tribunal les aseguró que las medidas de seguridad estaban dadas.

Y cuando se leyó el veredicto, la madre de Araceli, sentada en primera fila, rompió en llanto, al tiempo que el público aplaudió y exclamó “¡Vamos Araceli!” y “Grande Negra!”.

“Son unos cobardes que no quisieron dar la cara”.

“Esto es para todas ustedes. En cada chica que vea en la calle voy a ver a mi hija. Gracias a todos”, añadió la mujer y, al retirarse de los tribunales, besó la foto de su hija pegada en la pared delantera del edificio y soltó los globos violetas hacia el cielo.

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