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19 de abril, 2024

Crimen del matrimonio. “No hay duda en que Martín Del Rio participó del hecho”, dijeron los fiscales.

Hicieron una inspección ocular en una casa que había sido alquilada por el imputado y queda a dos cuadras y media de la de sus padres.

Dos de los fiscales que investigan el doble crimen de José Enrique Del Rio y María Mercedes Alonso, el matrimonio asesinado a balazos en su casa de Vicente López, aseguraron que para ellos “no hay ninguna duda” de que el hijo menor de las víctimas detenido por el caso es el autor del doble asesinato.

Los fiscales Marcela Semería y Martín Gómez encabezaron junto a la Policía Científica una inspección ocular en una casa ubicada en la calle Haedo 938 que había sido alquilada por el imputado y queda a dos cuadras y media de la escena del doble crimen cometido el pasado 24 de agosto.

“La prueba está más que clara, valorada por el juez de Garantías y por tres fiscales. No hay absolutamente ninguna duda en que Martín del Rio participó del hecho”, dijo a los periodistas que estaban la fiscal Semería.

Al mencionar las pruebas enumeró “las videofilmaciones, los posicionamientos de antenas, los intercambios de mensajes, los mensajes de WhatsApp y las vestimentas”.

“Por ahora, todo indicaría que actuó solitariamente pero no podemos descartarlo porque hay diligencias pendientes de producción”, agregó.

El fiscal reconoció que uno de los elementos que se buscan son los zapatos tipo trekking con los que el denominado “caminante encapuchado”.

“Ya tenemos un par de zapatillas incautadas que están pendientes de peritación en base a las imágenes que tenemos. Son zapatillas que claramente en las imágenes se visualizaban que son de color negro con suela blanca y que son las que llevaba el día que fue detenido. También se encontraron ese tipo de zapatillas en su domicilio”, señaló.

Gómez dijo que no la avalarían el pedido de prisión domiciliaria.

Gómez reconoció que en la casa que inspeccionaron no encontraron ningún elemento de interés, ya que “estaba completamente vacía” y que solo faltaba “vaciar la pileta”.

Se trata de una propiedad que el detenido Del Rio había alquilado, con opción de compra, junto a la agente inmobiliaria con la que tenía una relación extramatrimonial.

Dado que Del Rio tenía llave y que pasaron 14 días entre el día de los asesinatos y su detención, los fiscales no descartaban que en algún momento haya ido a descartar alguna evidencia que lo comprometa.

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