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28 de marzo, 2024

El asesinato de Nora Dalmasso. Declaró el pintor a quien le imputaron el crimen. “El Perejil” acusó a La policía, y al primer abogado del viudo de “armarle una causa”.

“Creo que se querían separar o algo así. Ella le reclamaba algo y él le decía que esto se iba a acabar”.

El pintor Gastón Zárate (42), quien fue bautizado por la sociedad de Río Cuarto como “El Perejil” luego de ser detenido e imputado sin pruebas por el crimen en 2006 de Nora Dalmasso (51), acusó a la policía y al primer abogado del viudo Marcelo Macarrón de “armarle la causa” para quedar involucrado en el caso, y sugirió que el asesino podría estar en el “círculo íntimo” de la víctima.

Al declarar como testigo sostuvo que “los policías y (el abogado Daniel) Lacase fueron los que me armaron la causa para que me metan preso”, y vinculó ese entramado a los efectivos que dependían del comisario Rafael Sosa.

Zárate, quien realizaba tareas de pinturas en la casa del barrio Villa Golf de la víctima en la fecha del crimen, ratificó que presenció un altercado entre la víctima y su marido días antes del asesinato.

Según dijo ante el jurado popular y el tribunal técnico de enjuiciamiento, Macarrón (62) le gritó a su esposa “todo esta se va a acabar”, tras una discusión de pareja.

Ante la pregunta si conocía el motivo de la discusión, a lo que Zárate respondió: “No sé bien. Creo que se querían separar o algo así. Ella le reclamaba algo y él le decía que todo esto se iba a acabar”.

El testimonio del bautizado “Perejil” motivó una nueva intervención del propio médico traumatólogo Macarrón, quien nuevamente solicitó al tribunal ampliar su indagatoria para responderle a Zárate.

“Es un embustero total”, dijo Macarrón, quien agregó que “nunca existió una discusión entre mi mujer y yo”.

Zarate fue detenido en febrero de 2007, casi tres meses después del crimen de Dalmasso, y quedó imputado por el delito de “violación y homicidio”.

Generó una fuerte reacción de la sociedad riocuartense, que realizó una marcha en repudio por esa detención, a la que llamaron “La marcha del Perejilazo”.

El pintor fue liberado 12 horas después de ser detenido, pero recién quedó sobreseído en el expediente cuatro años después, en marzo de 2011.

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