Durante la celebración de una misa un hombre se abalanzó sobre su expareja e intentó apuñalarla.
El agresor se ubicó en la última fila de asientos y luego de comulgarse abordó a su expareja y sacó de una bolsa de nailon una cuchilla similar a la que usan los carniceros.
El sacerdote se dio cuenta y se puso delante de la mujer. Los fieles se le abalanzaron al hombre para quitarle el arma blanca, mientras el atacante también amenazaba al religioso.
La víctima accionó el botón antipánico y llegó la policía que redujo al violento y se lo llevó detenido por tentativa de femicidio y amenazas.
La víctima tenía botón antipánico porque ya lo había denunciado por violencia y hostigamiento una vez rota la pareja.
Pasó en Lanús.
TRIBUNA ABIERTA