Una mujer fue atacada tras denunciar a una banda de agentes del Servicio Penitenciario Federal como los responsables de la desaparición de María Cash y de participar de una red de trata de mujeres. La testigo declaró que la diseñadora habría estado con vida hasta 2013.
La mujer salteña fue atacada por dos hombres tras declarar ante la Justicia de su provincia, a pesar de estar dentro del Programa Nacional de Protección de Testigos. Además de golpearla salvajemente, le cortaron la piel y le escribieron la frase “El macho siempre gana”. Se encontraba internada en el Hospital San Bernardo en Salta y ya fue dada de alta.
La denunciante, identificada como “Julia”, es la ex esposa del acusado Martín A., uno de los instructores de los guardiacárceles del penal de General Güemes. Sergio Chiericotti, abogado de la mujer, contó que “estuvo presa” en su casa hasta 2013. Además, dijo que ella asegura que en ese tiempo su esposo y miembros del servicio penitenciario traían mujeres a ese lugar y las tenían encerradas y drogadas.
El letrado indicó que su clienta sostiene en que una de esas chicas era María Cash, la diseñadora porteña que en el momento de su desaparición en 2011 tenía 29 años.
“En el año 2013 Julia dio aviso a la Justicia de Rosario de Lerma sobre este asunto. En esa comisaría y en otras había casi 35 denuncias sobre violencia de este tipo, pero por increíble que parezca esas denuncias nunca llegaron al Juzgado Federal, al menos eso quiero creer”, declaró Chiericotti. Y agregó: “Si se hubiese buscado a esa mujer en Campo Quijano quizá estaría hoy con vida, porque de lo que surge de lo relatado por mi clienta, María Cash habría sufrido una muerte seca”.
Por otro lado, incluyó que el hijo mayor de Julia, quien actualmente tiene 17 años, era el encargado de llevarle agua a las muchachas y “tiene en su memoria la misma información” que su madre.
SEGUIR LEYENDO EN PUNTOSEGUIDO
