Hizo la denuncia por su desaparición.
Ema Colque, de 50 años, estaba desaparecida desde el viernes de la semana pasada fue encontrada asesinada a puñaladas en su casa de Castelar, partido de Morón.
Por el crimen aprehendieron al menor de sus tres hijos, de 20 años.
El joven había hecho el lunes 15 de junio una denuncia por “averiguación de paradero” en la comisaría 3ra. de ese distrito porque no había regresado a su vivienda desde el viernes al mediodía.
El joven dijo que su mamá medía 1.58 metros, era de contextura física mediana, tez morocha y cabellos negros ondulados a los hombros.
La policía comenzó la búsqueda pero pese a los operativos realizados no se pudo dar con el paradero de Colque.
El joven sostuvo que recordó que vio un hombre discutiendo con su madre, que le dijo que se calle o la mataba, y él siguió jugando a la computadora.
Los investigadores comenzaron a sospechar y el fiscal Walter Leguisamo, a cargo de la causa, dispuso un allanamiento en su casa.
De esta manera, Policía Científica constató que el cuerpo de la víctima había sido enterrado en un costado del inmueble.
A simple vista, los efectivos observaron que la mujer había recibido tres heridas de arma blanca.
El fiscal Leguisamo ordenó la aprehensión del hijo menor de Colque como sospechoso de haber cometido el matricidio.
Ante la policía habría confesado que mató a su madre, pero si no lo hace ante la Justicia no tiene ningún valor.
