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La fiscal que investiga el crimen de la periodista correntina Griselda Blanco (45), quien fue hallada estrangulada en su vivienda confirmó que la víctima tenía «signos de defensa» en su cuerpo.
Se hallaron en la escena del hecho «muchos elementos», al tiempo que aseguró que no descarta ninguna hipótesis del asesinato.
Por el momento está aprehendido a la expareja de la mujer.
Los resultados preliminares de la autopsia revelan la presencia de un homicidio, sostuvo la fiscal a la prensa.
Blanco al ser hallada en su domicilio estaba estrangulada con una soga en el cuello, tirada en el piso, con golpes en el rostro y rastros de sangre, y que también tenía una herida de arma blanca.
El ministro de Seguridad provincial, Buenaventura Duarte, dijo a radio Sudamericana que «en la autopsia encontraron cabello en una de las manos de la víctima».
Nada se descarta, todas las líneas se están investigando tanto al posible femicidio por parte de su ex como a la línea como las amenazas que habría recibido la periodista por informes que publicó tanto por un caso de supuesta mala praxis en el hospital local como sobre un caso de abuso sexual que involucraría a un comisario.
Pasó en la localidad correntina de Curuzú Cuatiá.
TRIBUNA ABIERTA