Un empleado del Registro Automotor N*2 de Florencio Varela buscaba un archivo y, en un momento, dos inmensas estanterías con miles de papeles se cayeron al piso.
El hombre intentaba agarrar un papel en lo más alto de la inestable estantería, pero algo increíble sucedería.
Cuando se estiraba con la punta de sus pies para llegar a tomar lo que quería, empujó sin intención el mueble de atrás, que se terminaría desplomando, y por efecto dominó, tiraría el estante contiguo.