El presidente ruso no accederá a los pedidos que hizo Ucrania para lograr la paz.
Mientras el Gobierno de Ucrania pide más apoyo a la comunidad internacional por la invasión de Rusia, las autoridades de la ciudad de Jarkov denunciaron el impacto de proyectiles lanzados por fuerzas rusas a un reactor nuclear experimental.
El ataque sucede en el Centro Nacional de Investigación del Instituto de Física y Tecnología, donde se almacena combustible nuclear que podría provocar “una catástrofe ecológica a gran escala”, según advirtieron.
El alcalde la provincia de Jarkov, Oleg Sinegubov, también informó que los bombardeos derrumbaron la torre de la televisión local, que dejó sin señal a toda la zona.
En tanto, el ministro de Interior ucraniano, Antón Gerashchenko, afirmó que una serie de ataques de las tropas del Kremlin impidieron otra vez establecer un corredor humanitario en la ciudad de Mariupol. Sobre esto, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, manifestó que es “absolutamente esencial” lograr una “pausa”.
“Permitir la salida segura de los civiles de Mariúpol, Jarkov y Sumy y otros lugares en conflicto y garantizar que los suministros humanitarios vitales puedan entrar para la gente que quede”, escribió en Twitter el político portugués.
Además, Naciones Unidas acusó a las fuerzas de Vladimir Putin de también poner en peligro la seguridad de la central nuclear ucraniana Zaporizhzhia.
El gobierno ruso, por su parte, advirtió a los países limítrofes de Ucrania que, si permiten que aviones ucranianos sobrevuelen sus territorios, los considerará parte del conflicto. La medida fue anunciada luego de que varias naciones europeas tomaran la decisión de cerrar sus espacios aéreos a Rusia, a modo de represalia por la invasión.
En una nueva conversación con el presidente francés Emmanuel Macrón, el presidente ruso volvió a mostrarse inflexible y dijo que Kiev deberá cumplir con los “objetivos que exige Rusia, sea por la negociación o por la guerra”.
Según informó el gobierno británico, el primer ministro Boris Johnson dialogó con el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, para enviar más “material defensivo” al Ejército de ese país a través de sus socios occidentales.
La conversación se dio luego de que se conociera que alrededor de un millón y medio de ucranianos abandonaron su nación. La ONU dijo que 364 civiles fallecieron debido a la guerra y la comisionada de Derechos Humanos ucraniana, Liudmila Denisova, expresó que se confirmó la muerte de 40 niños, mientras que 71 han resultado heridos, cifra que “podría ser mayor”.
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