Tenía 1,97 alcohol en sangre.
Un motociclista murió a la altura tras ser atropellado por un auto.
La víctima tenía 28 años y tanta fue la violencia del choque que fue despedido de su moto hacia el carril contrario e impactado también por otro auto que tuvo chance de evitarlo.
El causante de la tragedia fue detenido y enfrenta cargos por homicidio culposo.
Pablo Ariel Santillán, la víctima, de 28 años iba conduciendo su moto por el carril rápido. Detrás de él, pero por la vía lenta, se observa a un Renault Sandero Stepway que intentó una maniobra por demás imprudente: cruzar dos carriles en una curva.
El conductor de ese vehículo, posteriormente identificado como Carlos Andrés Dip (43), intentó primero adelantarse a una Peugeot Partner sin éxito, ya que impactó en la parte trasera izquierda del utilitario.
Por ese motivo, perdió el control, cruzó dos carriles y atropelló a Santillán, que por la violencia del choque voló por los aires y cruzó el guardarrail y, una vez ya en el sentido contrario del autopista, fue embestido involuntariamente por un Toyota Corolla.
Santillán murió en el instante.
También acudió la policía, que además de detener a Dip, le realizó un test de alcoholemia que alertó por la cuantía: 1,97 gramos de alcohol por litro de sangre, casi el cuádruple de lo permitido.
Pasó en el Camino del Buen Ayre-