Después de 2 ruedas de reconocimiento la situación judicial de 3 de los imputados se complica aún mas.
El rugbier del CASI, institución que lo suspendió ni bien se conoció lo sucedido, Máximo Thomsen, sigue sumando testimonios como responsable de haberle pegado patadas cuando la víctima estaba inconsciente en el suelo.
Una versión señala que argumentará en su defensa que, en el momento que ocurrieron los hechos, estaba «borracho».
A Ciro Pertussi lo ubican como el que agredió a los amigos de Fernando, impidiéndoles que le prestaran ayuda.
El primero que pegó, al parecer en el interior del boliche donde se iniciaron las agresiones, fue Enzo Comelli. Tratan de establecer si también golpeó en calle.
Quien alentaba la feroz golpiza, de acuerdo al testimonio de los testigos de la segunda rueda, fue Matías Benicelli, quien a los gritos incitaba a que siguieran golpeando al pibe Báez Sosa cuando estaba en indefensión total.
Desde el momento que Fernando fue retirado del boliche «Le Brique», por personal de vigilancia, hasta que comenzó el dramático enfrentamiento en la vía pública sólo pasaron 9 minutos.
Todos los detenidos serán alojados en un sector especial de la Cárcel de Dolores y no tendrán contacto con otros presos.
Se teme que grupos de la población carcelaria puedan atacarlos.
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TRIBUNA ABIERTA