El juez David Mancinelli, titular del Juzgado de Garantías 6 de Dolores con sede en Villa Gesell, determinó dictar la prisión preventiva para los ocho rugbiers imputados por el asesinato de Fernando Báez Sosa.
Además, sumó el agravante de «alevosía» a la acusación del crimen cometido el 18 de enero a las afueras del boliche Le Brique en esa ciudad balnearia.
Se trata de Máximo Thomsen (20) y Ciro Pertossi (19), acusados de ser «coautores» del crimen; y Blas Cinalli (18), Luciano (18) y Lucas Pertossi (20), Enzo Comelli (19), Matías Benicelli (20), y Ayrton Viollaz (20), considerados por la fiscal Verónica Zamboni como «participes necesarios».
Por su parte, Juan Pedro Guarino (19) y Alejo Milanesi (20), quienes habían sido liberados, no volverán a prisión.
Blas Cinalli fue el único que hizo uso de la palabra cuando el juez se los ofreció y dijo: «Lo que pasó, ninguno de nosotros quiso que pase».
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TRIBUNA ABIERTA