El Gobierno aseguró, “es un precedente histórico para que no se vuelva a repetir un golpe de Estado”.
La ex presidenta de Bolivia, Jeanine Añez, fue condenada a 10 años de prisión, acusada de haber realizado un golpe de estado en 2019 contra su antecesor, Evo Morales.
El Tribunal Primero de Sentencia de La Paz dio a conocer el fallo, a cumplir en una cárcel de mujeres en La Paz, tres meses después del inicio del juicio y 15 meses después de que fuera encarcelada preventivamente.
El Gobierno de Bolivia aseguró que la sentencia “es un precedente histórico para que no se vuelva a repetir un golpe de Estado“.
Antes de escuchar la decisión de la Justicia, en sus últimas palabras, la ex senadora manifestó que fue sometida a un “simulacro de juicio” y que actuaría “de la misma manera” si se repitieran las circunstancias. También denunció que al Tribunal “el poder político le exigía un juicio exprés para tener una sentencia exprés”.
En la causa, llamada “Golpe de Estado II”, Áñez y ex jefes policiales y militares fueron procesados por decisiones contrarias a la Constitución. Allí, se la acusó de incumplimiento de deberes cuando era segunda vicepresidenta de la Cámara alta, para asumir la Presidencia del país de forma irregular.
En su alegato final, la ex senadora se declaró inocente y denunció que la Justicia “excluyó” pruebas que descartaban un derrocamiento de Morales y anunció que “acudiría a la justicia internacional“.
El ex presidente Evo Morales, por su parte, consideró insuficiente la condena contra Áñez y señaló en su cuenta de Twitter que “10 años de cárcel es una pena benigna en relación al daño que causaron a la democracia“.
Áñez tiene pendientes otros dos juicios, uno el “caso Golpe de Estado I”, por sus actos como presidenta del Estado, y otro por las muertes ocurridas durante las llamadas “masacres de Sacaba y Senkata“, en las que se reprimieron protestas callejeras.
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