“Ustedes me lo llevaron allá y me lo trajeron muerto”. De esta manera se quejó la madre de Rafael Nahuel, Graciela Salvo, hacia los mapuches vinculados al Lafken Winkul Mapu, las tierras ocupadas en Villa Mascardi donde el joven murió tras disparos realizados por integrantes del Grupo Albatros de Prefectura.
Desconsolada, pidió que se haga Justicia. Además se descargó ante varios mapuches que la miraban atentamente “Ustedes me lo trajeron en un cajón“.
El pasado domingo el padre del joven, Alejandro Nahuel, junto a su hermana Gabriela, hacía guardia en las puertas del Hospital Ramón Carillo de Bariloche, a la espera para recibir el cuerpo de su hijo sometido a la autopsia en la morgue.
El estudio médico arrojó que murió producto de una bala 9 milímetros que ingresó por su nalga y se alojó entre la axila y la costilla.
No todos en la familia están alejados des reinvidicaciones territoriales mapuches. María Nahuel, tía del joven, también participó de la ocupación en Mascardi y prometió seguir en dicho lugar.
Por su parte, el jefe de Gabinete Marcos Peña volvió a expresar el malestar de la cúpula del Gobierno hacia el juez federal Gustavo Villanueva. “Nos preocupa que no se hayan asegurado las pruebas“, exclamó.
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