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28 de marzo, 2024

Países Bajos. Campo de refugiados desbordado. Investigan la muerte de un bebé de 3 meses.

700 migrantes tuvieron que dormir a la intemperie. La organización Médicos sin Fronteras denunció que no se cumple con la atención de “necesidades básicas”.

Decenas de neerlandeses protestaron contra la inmigración en Ter Apel, una localidad de Países Bajo.

Desde hace varios días cientos de refugiados acampan en las afueras de un centro de recepción “desbordado” y en el que murió un bebé de 3 meses.

“El motivo de la protesta es que ya tenemos bastantes molestias, como los robos en las tiendas Y ahora vemos a las personas quedarse fuera, frente al centro de solicitantes de asilo”, dijo Eric Wessls, uno de los manifestantes, al canal Euronews.

“Decimos que los verdaderos refugiados son bienvenidos, como la gente de Ucrania o los que huyen del terrorismo islamista, pero esos son jóvenes africanos y no podemos tolerarlo por más tiempo”, agregó.

Unos 700 migrantes durmieron a la intemperie porque el centro de recepción de asilo, con una capacidad de 2.000 personas, está completo.

El lugar fue denunciado por Médicos Sin Fronteras por estar “desbordado” y ser “incapaz de atender necesidades básicas” hace tres días murió un bebé de 3 meses en condiciones que se investigan.

El hecho generó la reacción de la Comisión Europea, que instó al Gobierno a investigar a fondo la muerte del bebé.

“Ahora mismo no estamos centrados en otra cosa”, aseguró el primer ministro del país, Mark Rutte, quien describió la situación como “terrible”.

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