La reina Camilla y la princesa Kate observaban desde un balcón.
El rey Carlos, el príncipe William, el duque de Edimburgo y la princesa Ana encabezaron el servicio del Día del Recuerdo en el Cenotafio en el centro de Londres.
Mientras la reina Camilla y la princesa Kate observaban desde un balcón. El soberano ha liderado la ceremonia que honra la contribución de hombres y mujeres, militares y civiles británicos y de la Commonwealth, en la Primera y Segunda Guerra Mundial y otros conflictos.
Los miembros de la familia real, políticos de alto nivel y dignatarios depositaron ofrendas florales en Whitehall.
Miles de veteranos, personal del ejército y familiares de los caídos han participado para presentar sus respetos. Después de dos minutos de escrupuloso silencio solo roto por el sonido de los helicópteros que sobrevolaban Londres comenzó la ceremonia.
Se colocaron a los pies del Cenotafio las tradicionales coronas de amapolas con las que se rinde homenaje a los caídos en este Día del Recuerdo.
El Cenotafio, el monumento a los caídos más sagrado para los británicos, ha permanecido bajo custodia policial durante todo el fin de semana. 9 agentes de policía resultaron heridos al impedir que una multitud violenta formada principalmente por hooligans de fútbol llegara al monumento a los caídos.
Este año por primera vez han participado en el desfile los veteranos de las pruebas nucleares, quienes lucían una medalla en reconocimiento a su contribución.
